Cinco cócteles sin alcohol a la francesa para disfrutar del buen tiempo
Los primeros días de calor del verano piden a gritos bebidas refrescantes y aromáticas, pero no tienen por qué llevar alcohol. La prueba son estos cinco cócteles «sin» y locales (o casi).
Delicia herbal a las hierbas de Provenza
Compra hierbas de Provenza Label Rouge e infusiónalas en frío. Añade un toque dulce con sirope de verbena de Vélay y, para que el cóctel resulte todavía más sugerente, haz unos hielos con las hojas y pétalos comestibles que más te gusten. También puedes sustituir el tomillo, el romero, la ajedrea y el orégano provenzales por el helicriso de Córcega y suavizarlo con una pizca de mirto: ¡el secreto es respetar el alma de la tierra!
Té helado al sirope de castaña de Ardèche
Infusiona en frío un té verde, por ejemplo, sencha japonés, durante al menos 30 minutos y preferiblemente con agua filtrada. Sírvelo bien frío, realzado con un toque de sirope de castaña de Ardèche. Si prefieres el té negro de Assam, opta por una cucharada de miel de bosque y una pizca de pimentón de Espeleta. ¡Ya nos dirás qué te parece!
Mezcla fermentada a la francesa
¿Te suenan el kéfir de agua y el té kombucha? Estas bebidas ligeramente espumosas se elaboran en casa, durante varios días, a partir de una preparación madre. En el primer caso, se mezclan los gránulos de kéfir o tíbicos con agua, azúcar, frutos secos y limón; en el segundo, se trata de una especie de hongo que se sumerge en té azucarado. Pero también puedes comprar cualquiera de los dos ya hechos y dejarlos macerar varias horas con hierbas aromáticas, especias u otros ingredientes franceses: vainas de vainilla de Tahití, cáscaras de melón Charentais, un tercio de zumo de pera de Domfront… Degústalos muy fríos, en vaso grande.
Sobacha de trigo sarraceno bretón
Acércate a una tienda de productos ecológicos para comprar sobacha bretón. Se trata de una especie de «té» en granos muy apreciado en Japón. Pero ahora también se elabora en Bretaña… con trigo sarraceno. Infusiónalo en caliente. Déjalo enfriar por completo. Sírvelo con hielo y un cordón de sirope de horchata de Marsella. ¡Madre mía!
Limonada al azúcar moreno
Prepara un sirope calentando una mezcla compuesta por agua y azúcar moreno del norte de Francia a partes iguales. Añade limones de Menton troceados y deja que hierva. Añade aproximadamente el doble del volumen de zumo de limón. Mezcla. Deja enfriar. Macera la mezcla con menta y unas rodajas de pepino. Sirve la limonada rebajada con agua con gas. El azúcar moreno le aporta a esta limonada casera aromas a caramelo que cambian… ¡A mejor!
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