Burdeos, una Región Vanguardista !

Prejuicios Injustos 

A veces, hay verdades que hay que señalar. Tomemos como ejemplo la región de Burdeos. En primer lugar, las fincas más famosas de las denominaciones emblemáticas de Médoc y Saint-Émilion son más bien la excepción y no la regla. Si bien son un escaparate halagador, estas producen alrededor del 1 % de los vinos de la región. En segundo lugar, lejos de los vinos estrella, cuyos precios alcanzan a veces cotas estratosféricas, miles de fincas en Francia producen vinos que en el mercado cuestan entre 5 y 25 euros. En tercer lugar, cada vez son más los viticultores de la región de Burdeos que siguen un enfoque natural/ecológico. De modo que no, en contra de la creencia popular, en esta región no todo son châteaux de prestigio, grands crus, vinos carísimos y viticultura convencional. 

La DOC Castillon Côtes de Bordeaux 

Cabe destacar, por ejemplo, la orilla derecha y el territorio de la DOC Castillon Côtes de Bordeaux. Aunque no tiene la misma fama que Margaux, Pomerol o Sauternes, en las últimas añadas se ha impuesto como una de las denominaciones más dinámicas y apasionantes de la región. Este territorio, adyacente a Saint-Émilion y en gran parte orientado al sur, presenta tres principales tipos de terruño con excelentes cualidades: grava cerca del curso del Dordoña, arcilla en la parte inferior de las laderas y arcilla caliza o incluso caliza en las mesetas más altas. Aquí, siguiendo la estela de algunas figuras pioneras de la agricultura ecológica y biodinámica, como Thierry Valette, se han instalado recientemente algunos jóvenes con el mismo espíritu. ¿Cuál ha sido el resultado? En la actualidad, casi el 25 % de las fincas son ecológicas o biodinámicas, una cifra muy superior la media de la región y de Francia. 

El Caso de Château Brandeau 

En Les Salles-de-Castillon, la vid no tiene el monopolio de una geografía ondulada, ya que cohabita con bosques, humedales y pastos. Aunque se siente como en casa, Julien Voogt no es de aquí. Hijo de restauradores belgas, en el pasado elaboró vino en Marruecos, Nueva Zelanda e incluso en Quebec, y trabajó en otras fincas de la región antes de iniciar su propio negocio. No es heredero de un gran patrimonio ni un rico inversor, sino simplemente un viticultor. Si el vino ecológico le parece algo evidente, también toma prestadas algunas prácticas de la agricultura biodinámica y a veces utiliza un caballo para arar sus parcelas. Sobre todo, apuesta por vinos fáciles de digerir, cercanos al terruño y a la fruta, en las antípodas del estilo tecnológico, adulador y excesivamente amaderado. Incluso los nombres de sus creaciones —Banzaï, Gas Gas o Joue Franc Jeu— y el diseño de sus etiquetas escapan al estilo bordelés clásico, al igual que su precio, que es muy razonable (15 euros como máximo en Francia). En definitiva, Julien Voogt y sus vinos demuestran de forma clara que, en la región de Burdeos, es posible hacerlo muy bien de forma natural y barata en DOC llenas de vitalidad. ¡Y no es el único! Sin duda, el sector vitivinícola de la Gironda está evolucionando y empieza a demostrar que sus detractores se equivocan. El que avisa... 

La Selección de Taste France Magazine 

Château Brandeau - Castillon Côtes de Bordeaux – «Banzaï», 2020 
A veces, el Merlot puede resultar algo abrumador, con excesiva madurez y dulzura. No es el caso de este vino. Sin estas exuberancias, en términos de fruta y placer, este vino fluido y de gran frescura cumple perfectamente su misión. 

Château Brandeau - Castillon Côtes de Bordeaux - 2019 
Con esta cuvée, Julien Voogt ha conseguido toda una proeza: conciliar la seriedad de la tradición bordelesa con el disfrute inmediato de los vinos naturales. Perfecto para un largo aperitivo con amigos o para una comida de domingo con la familia.  

Château Brandeau - Castillon Côtes de Bordeaux – «Franc Jeu» 2021 
Este vino, elaborado a partir de la variedad de uva cabernet franc y envejecido en ánforas, va directo al paladar y hace gala de una gran bebibilidad, una fruta brillante, una agradable textura en boca y un final deliciosamente salino.