El maestro quesero parisino Fabrice Gepner nos aconseja cómo hincarle el diente al queso francés, los mejores maridajes de queso y vino, y nos enseña a preparar la tabla de quesos perfecta.
Una de las mejores formas de aprender sobre gastronomía es hablar directamente con los expertos. Por eso, en nuestra sección «Preguntamos al experto», acudimos a los mejores profesionales del sector gastronómico para que nos cuenten sus secretos.
Hoy vamos a charlar con el mismísimo «friqui del queso», el maestro quesero parisino Fabrice Gepner, para que nos dé unos consejos a la hora de elegir y comer queso francés.
Queso francés 101
Este artículo es para ti tanto si te pierden los quesos más potentes como si te cuesta distinguir el brie del camembert (Gepner describe el brie como un queso más suave y «láctico» que el camembert, que es «rústico y atrevido»). ¡El mundo del queso francés es tan rico y variado que tenemos muchas cosas que aprender de él!
Pese a que la industria quesera de Francia cuenta con una gran promoción en todo el mundo, no se trata simplemente de una cuestión de marketing, a este sector lo respaldan siglos de conocimiento y tradición. ¿Necesitas más pruebas? Solo tienes que echar un vistazo a los sistemas de etiquetado europeos DOP e IGP cuyo objetivo es reconocer el vínculo de un producto (queso en este caso) con una región concreta a través de sus ingredientes, su elaboración artesanal y las tradiciones locales.
Los franceses se han relajado mucho en lo que respecta a la forma de disfrutar de un queso. Según Gepner: «En Francia, tradicionalmente, se sirve entre el plato principal y el postre, pero ahora también te lo puedes tomar de aperitivo. ¡Para una comida perfecta, no necesitas más que vino y queso!».
Ahora que ya sabes lo fundamental, ¡vamos a descubrir cómo disfrutar del queso francés!
La guía de Fabrice Gepner para comer queso francés
¿Cuál es tu mejor consejo para maridar queso y vino?
La primera regla es asegurarse de que el grado de intensidad sea el mismo para que uno de los componentes del maridaje no solape al otro. Después, puedes jugar con el equilibrio del gusto y con como los sabores se complementan. En definitiva, si tienes una tabla de quesos yo recomendaría maridarla con una botella de vino blanco, preferiblemente del valle del Loira si es posible, ya que irá muy bien con la mayoría de los quesos.
Hablando de tablas de quesos, ¿cómo creas la tabla perfecta?
¡Con diversidad! Eliges distintos tipos de leche (cabra, vaca, oveja) y distintos tipos de queso (de corteza enmohecida, de corteza lavada, queso azul), y luego para que resulte apetitosa, juegas con los colores y formas para prepararla.
¿Podemos comernos la corteza del queso?
¡La corteza del queso siempre es comestible! En mi opinión, siempre resulta interesante. Es una parte del queso porque le aporta textura y sabor. Así que, ¡no te dejes la corteza!
¿Qué recetas recomiendas para probar quesos franceses?
En invierno siempre recomiendo una buena raclette o fondue. La raclette básicamente consiste en añadir queso derretido a una patata, mientras que en la fondue mojamos pan en una olla con queso caliente. Otra opción sería un welsh rarebit. Este plato consiste en coger un poco de pan y bañarlo en cerveza, después colocar jamón, queso (cheddar o maroilles) y meterlo todo al horno para que se gratine.
Descubre más curiosidades sobre el queso francés
Si Fabrice te ha abierto la gana para sumergirte más en el mundo de los quesos franceses y las mejores formas de disfrutarlos, no te pierdas el vídeo de la entrevista completa o echa un vistazo a nuestro directorio de quesos y productos lácteos franceses.