¡Es el rey de los mariscos para la mayoría de los gourmets! ¡No podría ser de otro modo! Más allá de su voraz apetito, sus diez patas y dos pinzas, este señor de las costas atlánticas exhibe una carne firme e inmaculada, incluso ligeramente nacarada, con un delicado sabor a mar. Es la inspiración de muchas recetas marineras estupendas: bogavante Thermidor, à la armoricaine, en bisque... ¡No faltan las opciones!
Lo que hay que saber
Aunque la temporada del bogavante azul está en pleno apogeo desde marzo hasta mediados de octubre, las fiestas navideñas reclaman inevitablemente este manjar. Se pesca preferentemente con trampas cebadas, cerca de las escarpadas costas atlánticas y debe tener una talla mínima para poder conservarse y respetar así la renovación de las poblaciones. Afortunadamente, las langostas viven bastante tiempo, de seis a diez años, antes de alcanzar un tamaño de 30 a 50 cm y un peso que varía desde 500 g hasta varios kilos para los ejemplares más grandes.
Características
Color
Al tacto
Paladar
Nutrición y propiedades
El bogavante azul es rico en proteínas, minerales y vitaminas.
Nota de la redacción
Cómo se utiliza
Conservation
24 horas como máximo, en un lugar fresco, envueltos en un paño húmedo.
Preparation
Siempre es aconsejable desechar los intestinos y las bolsas de tierra de la cabeza. Según la receta, el coral se reserva para hacer una salsa de color rojo anaranjado intenso.
Utilisation
El bogavante azul se consume cocido de varias formas: entero, en agua hirviendo; cortado por la mitad, a la parrilla, a la barbacoa, al fuego de leña... También se utiliza en la composición de diversos platos más elaborados, como el bisque, el suflé, gratinados, estofados...
Para ser emparejado con
Con espinacas, naranja, curry, vainilla, sidra... ¡Se acompaña con un vino de Savennières!